Una consulta habitual que recibo es sobre la cifra del anticipo en concepto de derechos de autor que figura en los contratos de edición. ¿De dónde sale esta cifra? ¿Cómo se obtiene? ¿Cuál es el procedimiento para fijar el anticipo?
No es ningún misterio para quienes trabajamos en el sector editorial. Sin embargo, es lógico que entrañe cierta confusión para otras personas. Sobre todo si no se especifica de forma correcta en los contratos o no se explica de dónde deriva.
En esta entrada explico cuáles son las variables que intervienen para deducir el anticipo. Enigma no hay, solo números y cuentas.
Qué es un anticipo por derechos de autor
El anticipo es el dinero que el creador de un contenido recibe a la firma del contrato. En el caso de los libros, el contrato es de edición y publicación con una editorial tradicional. (Cualquier otro tipo de editorial cobra por publicar).
Este anticipo —y de allí el nombre— es un adelanto que el autor recibe en concepto de regalías por la obra que publicará. El autor recibe la regalía en concepto de derechos de autor y esta se relaciona con la totalidad de ejemplares vendidos.
En resumen, el anticipo es un adelanto del total que cobrará por la venta de sus libros.
El concepto de anticipo siempre estuvo ligado a los libros impresos, porque el anticipo se calcula sobre la base de los ejemplares que se imprimirán. Esto no se puede hacer con los libros electrónicos, ni siquiera considerando archivos.
En los ebooks la obra está contenida en un archivo y este puede reproducirse tantas veces como se quiera, por tanto no existen los ejemplares.
Así, es necesario establecer una diferencia del concepto de anticipo para el libro impreso y para el libro digital.
Tanto en un caso u otro, el anticipo es un concepto que debe estar consignado de forma clara en el contrato de edición, además de que así lo estipula la Ley de Propiedad Intelectual en su artículo 62, inciso b).
En el contrato de edición, el anticipo puede estar expresado de dos formas:
- por una suma concreta en una determinada divisa; por ejemplo, 2000 €, o
- por un porcentaje en relación con un valor; por ejemplo, 10 % del PVP del libro impreso.
Anticipo para libros impresos
En el caso de los libros impresos, para establecer el anticipo que un autor percibe, el editor hace la siguiente cuenta.
Esta cuenta, a su vez, deriva del escandallo editorial, donde el editor ha calculado los costes totales de elaboración de la obra y la estimación de venta de los ejemplares del libro impreso.
Retomo el ejemplo que expuse en Reparto de porcentajes en la edición de un libro impreso:
Precio de venta al público (PVP): 10,40 €
Precio de venta sin IVA: 10,00 €
Cantidad de libros a imprimir en la 1ª edición: 2000 ejemplares
Porcentaje por derechos de autor: 10 % del PVP de libro = 1 € por libro
10,00 € × 2000 ejemplares = 20.000 €
Anticipo: 10 % de 20.000 € = 2000 €
Si acuerda un 10 % al autor le corresponde 1 € por cada libro vendido. Como el editor proyecta que venderá 2.000 ejemplares le anticipa el 10 % de la edición a cuenta de las ventas futuras que es de 2.000 €.
El editor es quien debe “hacer bien” las cuentas. Debe tener la certeza de que la primera edición del libro se venderá en tu totalidad para cubrir el porcentaje destinado al copyright de la obra.
Si hubiera más reimpresiones o ediciones de la obra, el autor cobrará un 10 % por cada libro vendido en esas reimpresiones y ediciones. Si hubiera menos ventas de las proyectadas por el editor es este quien asume el riesgo de no cubrir el anticipo.
Cambio de costumbres
En la actualidad, y por la crisis general del sector, es entendible que el editor no pueda efectuar un adelanto equivalente al total de la primera edición. Es decir, que no pueda abonar el 10 % del total de las ventas que ha proyectado de la obra a la firma del contrato.
Algunas editoriales ofrecen al autor la mitad del anticipo; es decir, un 50 % de lo que tradicionalmente le correspondería. Después de todo, la forma que establecer el anticipo es consuetudinaria. No existe norma o ley que establezca cómo debe hacerse.
Varios porcentajes según modalidad de edición
Por lo general, en un mismo contrato de edición se establecen los porcentajes para las diferentes modalidades de edición. Pero el anticipo siempre se calcula sobre la modalidad más habitual de publicación.
Así, encontramos distintos porcentajes para trade o tapa dura, paperback, bolsillo, canal club, edición especial, electrónico, etc. Si la editorial publica normalmente en tapa blanda el anticipo se obtendrá sobre paperback.
Un problema con el que el autor puede encontrarse es que el contrato de edición no especifique la cantidad exacta de ejemplares a imprimir en la primera edición y la cláusula esté redactada de este modo: “La primera edición constará de un mínimo de 1000 ejemplares y de un máximo de 3500 ejemplares. El número de ejemplares a imprimir se determinará con un mes de antelación a la fecha de publicación”.
De encontrarse con esta situación, el autor debe exigir —y el editor tiene la obligación de otorgarlo— el certificado de impresión.
Lo expide la imprenta y en él se especifican las características y la cantidad de ejemplares del libro impresos en la tirada. De esta forma, podrá corroborar cuánto le corresponde cobrar por derechos de autor por la primera edición de su libro.
Como en la edición digital el anticipo funciona de forma diferente porque no existen los ejemplares sobre los cuales calcular el adelanto, se conseja firmar otro contrato por las modalidades de edición digital, incluso si el autor cede los derechos a un mismo sello editorial para todas las modalidades.
Anticipo para libros digitales: el anticipo inexistente
El anticipo para el autor en las diferentes modalidades de edición digital no puede establecerse sobre la base de los ejemplares, porque estos no existen. Solo existe un archivo que puede reproducirse tantas veces como se desee.
En digital, prácticamente no existe el anticipo por publicar. Rara vez se abona por adelantado a un autor para publicar en ebook.
De acuerdo a las indagaciones que realicé, y que están expuestas en Reparto de porcentajes en la edición digital, el autor recibe un 25% en concepto de derechos de autor por publicar en digital.
Pero lo anterior hace referencia a la remuneración sobre copias vendidas, no como anticipo.
En el caso de que exista un anticipo en la edición digital es porque la editorial no ha separado los derechos digitales de los del papel y hace un paquete estilo “2 × 1”. Entonces la editorial paga al autor un anticipo por ambas o todas las modalidades de derechos cedidos.
Algunas editoriales pequeñas no dan anticipo porque no pueden permitírselo, independientemente de si editan en digital o en papel.
Finalmente, el anticipo no solo puede aplicarse al autor de una obra sino también a su traductor, ilustrador, etc. Ellos también pueden solicitar el pago de un adelanto por sus regalías.
Gracias por compartir tus conocimientos, Mariana.
Gracias a ti por leerme Eduardo 🙂
No refieres lo suficiente a una modalidad de edicion que AUTORESEDITORES.COM esta promocionando en todos los paises y grupos hispanos, con bastante ayuda para que el autor haga si quiere y puede todo el trabajo de edicion o pague para ciertos servicios solamente. Mantienen una libreria y solo imprimen y venden bajo pedido en papel o electronico con pago extra del transporte, no usan contrato, en sus paginas web aseguran que el autor mantiene todos los derechos clasicos y dan varias opciones a elegir para todo desde cero de regalias hasta 100% del precio de impression,que el lector lo puede calcular al instante. El autor no gasta un centavo si hace todo. Pero si decides usar su sistema y te quieres registrar esta su clara advertencia que al hacer clik aceptas todas sus condiciones,entras a su referencia y lees en cuanto a derechos de autor que si ellos publican cualquier contenido o contenido de contenidos, son duenos de lo que estan publicando y el usuario (porque al hacer Click cede cualquier derecho) no puede modificar nada de lo publicado sin autorizacion de ellos, o sea se convierte en un simple comprador de ejemplares de su obra y paga como cualquier otro usuario, logicamente le sugieren que poner cero regalias abaratara precios de ventas lo mismo que obtener ISBN y para ello y para registrar derechos de autor,regalar a amigos y familiares ,requerira comprandolos un lote y asi el autor es tal solo en cuanto a meritos, ellos no renuncian a nada.Tienen un servicio para salir de dudas y Si se les hace ver esa contradiccion entre sus afirmaciones de propaganda y sus condiciones te reafirman que leas bien y comprendas que los contenidos de los contenidos de lo que publiquen son de propiedad de ellos. Practicamente te dicen eres ingenuo y con esto te volveras mas. Y si eliges que te paguen un % por venta de libros te aseguran que asi sera en la cuenta que habrs cada seis meses si alcanzas a 100 $ o su equivalente, pero no te dicen como puedes controlar eso ni menos saberlo. Un nuevo timo que nos trae la modernidad y la crisis que deberia ser denunciado, ellos operan desde Espana e imprimen y distribuyen en Colombia .Los ingenuos y sugestionables noveles autores, creativos no tienen porque ser ademas abusados y vaya uno a saber si ellos pagaran impuestos o quien puede controlar sus ganancias.
Hola, Osmal:
No refiero a esta empresa que mencionas porque en esta entrada no tiene cabida por la temática. Sobre este tipo de editoriales —que no son tradicionales sino de coedición o autoedición— puedes encontrar información en otras entradas de este blog:
De qué hablamos cuando hablamos de coedición
Cómo identificar una editorial de coedición
Falsa distribución de libros en editoriales de autoedición o de coedición
Las regalías a las que refiero en esta entrada son las de una editorial tradicional, una editorial que paga al autor por publicar sus libros, por derechos de autor; una que no cobra al autor por publicar su libro. El «gratis» no existe, por tanto, algunas que no cobran por publicar lo que hacen es quedarse con algunos derechos o porcentajes por la venta de los libros.
Saludos
«El editor es quien debe ‘hacer bien’ las cuentas y tener la certeza de que la primera edición del libro se venderá en tu totalidad».
Se cree erróneamente que el editor puede llegar a vender el 100% de la tirada. Obviamente, los ejemplares justificativos (para el autor), los destinados a promoción y los defectuosos no se venden, y están por tanto exentos del pago de regalías, tal como, conforme a la Ley de la Propiedad Intelectual, estipula cualquier contrato de edición.
Eso para empezar, a partir de ahí podríamos hablar de porcentajes de colocación de la tirada, y, no menos importante, porcentajes de devolución de esos ejemplares colocados, que no vendidos. Todo lo que sale del almacén del editor es susceptible de volver.
Es decir, vender el 100% es una quimera.
Gracias por pasarte por aquí y comentar Roberto.
Tal como están las cosas sí puede ser una quimera querer vender el 100% de una tirada, pero si el editor no piensa en vender todos esos ejemplares que imprime ¿para qué lo hace? ¿Para qué gastar en 1000 ejemplares si el editor piensa que se venderán 500?
Bueno, en primer lugar, como he comentado, no todos los ejemplares impresos se destinan a la venta; en segundo (simplificando mucho la cosa), si te mueves en un mercado con un porcentaje de devolución del 30%, has de colocar, y por tanto imprimir, 1.000 ejemplares para vender 700. Y, last but not least, el futuro no se puede predecir. El editor trabaja con libros, no con bolas de cristal.
Lo cual no quiere decir que no se pueda ajustar la tirada a la expectativa de venta, y así se hace. Por ejemplo, sabiendo que las ventas medias de un ensayo están en torno a los 800-900 ejemplares durante los cuatro primeros años (momento a partir del cual el stock en almacén deja de ser un activo), se pueden imprimir 1.200, que incluyen la devolución y los ejemplares no destinados a la venta que he mencionado.
Saludos
Los ejemplares no destinados a la venta no se cuentan para el pago del anticipo y ello consta en el contrato de edición (a veces de forma no muy clara los destinados a marketing, pero sí los que corresponden al escritor como autor de la obra).
He planteado la pregunta un tanto adrede para que saliera el tema de las devoluciones 😉
El problema está, justamente, en que el editor debe imprimir más de lo que estima vender realmente para que los ejemplares circulen, vayan y vengan de la editorial a la librería pasando por el distribuidor; esto lo veo como una disfunción del sistema. Lo que a mí me parece absurdo es que se publique un libro pensando que se va a perder X por ciento, que se publique pensando en las devoluciones; es perder tiempo y dinero a sabiendas…
El dinero no es la medida de todas las cosas. La pregunta a la hora de publicar un libro no es necesariamente si será rentable, sino si su publicación aporta algo a la sociedad, si seguirá teniendo lectores dentro de cinco, diez o cincuenta años, si los tendrá dentro de un siglo…
La rentabilidad, o más bien la viabilidad, ha de contemplarse para el catálogo, para el conjunto de las obras, no para un libro particular. La clave no reside en que el barco (editorial) sea grande, sino en que flote en la tormenta. No se trata de deslumbrar, sino de ilustrar, de dar luz al entendimiento.
Lo dicho, el dinero no es la medida de todas las cosas.
En este punto disiento contigo, Roberto. La editorial es una empresa y, como tal, debe ser rentable y, para ser rentable, debe vender libros y, en lo posible, hacerlo en (muy) pocos años, porque de lo contrario muere, cierra. Ninguna editorial se crea solo con la idea de aportar algo a la sociedad o pensando si dentro de muchos años tendrá lectores, porque como empresa que es debe contar con dinero para seguir existiendo. La función social y cultural está muy bien, pero no debe escindirse de la comercial y financiera.
Resulta difícil debatir con quien insiste en tergiversar o malinterpretar tus palabras. No veo el menor atisbo de dinerofobia en mis comentarios previos. En ningún lugar he dicho que el dinero carezca de importancia. Es más que importante, es el requisito indispensable para mantener la independencia de la línea editorial.
Tampoco recuerdo haber escrito que la cara cultural y la comercial de la edición sean incompatibles. Más bien al contrario, a lo largo de la historia de Occidente, libertad, cultura y prosperidad económica suelen ir de la mano. En lo que respecta al libro, ha sido históricamente un producto de rentabilidad baja, en torno al 4%, pero segura. Es decir, el doble del 2% al que ha venido creciendo la economía mundial desde que se inventó el papel moneda y la propiedad intelectual.
No está mal, pero para algunos el dinero sí es la medida de todas las cosas. Los problemas del sector surgen cuando las grandes corporaciones hacen su entrada en escena en el mundo anglosajón, durante la segunda mitad del siglo pasado, y comienzan a exigir márgenes de beneficio inviables; modelo que ha copiado el resto de Occidente y que ha sido el camino más rápido hacia la ruina de las empresas editoriales. En España, no hace mucho, Beatriz de Moura se lamentaba de haber cometido el error de crecer demasiado y abandonar la edición artesanal en la década de los ochenta del siglo pasado. Más: «En Planeta somos geniales, en cuanto compramos una editorial por lo que publica y por cómo lo hace, la planetizamos tan rápido que luego necesitamos años y muchísimo dinero para reflotarla otra vez». José Manuel Lara http://patrulladesalvacion.com/2013/09/30/el-nuevo-rol-del-editor-en-revista-trama-texturas/
Mariana, una inestimable entrada por su claridad y sencillez. Es de agradecer que alguien se ofrezca desinteresadamente como tú a aportar esta información tan difícil de hallar y a menudo encubierta por la letra pequeña. La guardo por si algún día…
Eres una buena profesional y persona, Mariana. Abrazo
¡Gracias por tus palabras Carme! Siempre animan a seguir compartiendo conocimiento 🙂 Un abrazo.
¡Hola, Mariana! Muy buena entrada y muy ajustada a la realidad, puesto que lo sé por experiencia. Incluso estos porcentajes que apuntas suelen ser de lo más alto; a veces, los editores dan mucho menos y otras ni siquiera están dispuestos a dar adelanto. Los autores debemos conocer estas cosas para poder plantarnos frente al editor cuando quiere pasarse de listo. Aparte de que los libros les interesan a los buenos editores para mejorar el mundo, para iluminarlo y ampliar la libertad y cultura… si con ello ganan dinero mejor que mejor. Saludos cordiales.
Hola Luis. Sí que los porcentajes están un poco altos en el ejemplo si quien publica es un autor novel o poco conocido. Cuando se trata de un autor que publica por primera vez, el porcentaje en concepto de derechos de autor puede oscilar entre un 6% y un 8% para el trade y entre un 4% y un 6% para el libro de bolsillo. El editor siempre tiene que ganar dinero con un libro (como si se tratara de cualquier otro producto), la editorial es una empresa y debe buscarse la forma de que sea sostenible, viabe y rentable.
¡Muchas gracias por visitar mi blog y comentar!
Muy buena entrada, Mariana, ya que es un tema que siempre ha suscitado dudas y controversias.
En todos estos años con AENoveles (Asociación de Escritores Noveles) doy fe de que el % que se la da al autor novel es inferior al 10%, aunque en algunos casos sí se le ofrece dicho porcentaje, incluso recibe pequeños anticipos sobre su futura venta. Desde luego, son muy pocos casos y depende también del género de la obra (su demanda, etc.).
Gracias también por el intercambio con Roberto Ramos, en el que aún se ha profundizado más en algunas vertientes del tema.
Un saludo,
Covi S.
Muchas gracias Covi por comentar y hacerlo también desde la visión de un colectivo como es la AENoveles (Asociación de Escritores Noveles).
Éste es un tema que, como otros del sector editorial, dan para hacer no un post sino varios, y más. ¡Saludos!
Una entrada muy interesante, Mariana, por el post en sí y por el debate que ha generado. No es común encontrar estas informaciones tan claras y tan precisas y pueden ser de gran ayuda para alguien que empieza en el mundo editorial. Yo, por ejemplo, desconocía cómo se calcula el anticipo en las ediciones digitales. 🙂
Espero que sigas compartiendo tus conocimientos con nosotros.
Un saludo cordial.
Me alegro que te haya sido útil el post Pedro 🙂 ¡Saludos!
De acuerdo con tu explicación, aunque una observación desde la experiencia: el ANTICIPO sobre los derechos de autor no suele ser el 100% de los derechos que generará una primera edición (o tirada), sino un aparte solamente, aunque hay casos que los anticipos no tienen relación con nada, dependen del interés del libro y autor, de si se trata de un premio -Premio Planeta, por ejemplo- o de otros factores objetivos o subjetivos del Editor… Creo que es un tema mas complicado de lo que pueda parecer.
Saludos Mariana y a tu disposición…
Tradicionalmente el establecimiento del anticipo era así; sin embargo con tantos cambios en la edición varios aspectos han mutado y así seguirán haciéndolo, incluso los anticipos. En el caso de los premios el tema es diferente y daría para hacer otro post. Evidentemente, el tema es complicado y ofrece múltiples desgranes… Gracias por visitar mi blog y comentar José María. Un saludo.
Gracias por compartir dicha información, pues quienes incursionamos en el mundo literario así sea por pasatiempo o por pasión, no contamos con mucha orientación al respecto.
Me alegro que te resulte útil la información, Andrés. Saludos.
Muy instructivo. Esclarecedor.
Ojalá me lo tuviera que mirar con lupa, buena señal…
Hay gremios profesionales alejados de convenios, y oficios poco dados al sentido práctico. Estas puntualizaciones, Mariana, no sobran.
Un pequeño matiz: una editorial es empresa y, como tal, ha de ser sostenible, viable y rentable. Evidente.
No obstante, si cumple con esos objetivos y se mantiene, podría apostar por productos no traducidos en beneficios inmediatos , sino a medio o largo plazo. Cuestión de prestigio.
Existe un vínculo, cuando no compromiso, con la sociedad; implícito o no; adquirido mediante subvenciones del erario; o por gozar de la difusión de los medios de comunicación públicos.
Sé que esta idea de invertir a fondo perdido es ajena al espíritu empresario del país. Un error, me parece.
Hace 10 años una editorial que poco tiempo después cerró su empresa, me publicó 2 cuentos infantiles. En su momento me abonó las cantidades económicas que correspondieron a las ventas. Pero desde que cerró, aproximadamente hace 9 años, nadie me ha abonado ninguna cantidad.
En todo este tiempo el poco porcentaje que me haya correspondido ¿Quién se lo ha llevado? ¿la editorial? ¿la distribuidora? ¿con quién me pongo en contacto para aclarar esta situación? los libros siguen a la venta, están en manos de una buena distribuidora. En el futuro ¿hacienda me puede llegar a reclamar algo?
Espero pueda aclarar mis dudas. Un cordial saludo
Ana Mª García
Hola Ana María. Habría ver, antes que anda, el contrato que has firmado y las cláusulas una a una. El contrato es el origen de la relación con la editorial y allí se especifica qué sucede en caso de disolución o venta de la editorial, la periodicidad y forma de las liquidaciones, etc. Al momento de cerrar la editorial deberían haberte informado a quién se la vendieron y a quién traspasaron los derechos de explotación de la obra.
Entiendo que si nadie te ha pagado en conceptos de derechos de autor, tú no has cobrado, no tiene Hacienda sobre qué reclamar… Seguro que un gestor te aclara este punto. Saludos.
Oh! Superinteresante el artículo!!!
Te comento un par de anécdotas que tienen que ver con un escritor que conozco personalmente, pero al que, evidentemente, no le pregunté nada de esto que comentas por ser educado y no pecar de insolente, más que nada.
Él es un autor que ya no es novel, pero que nunca había escrito novelas (no digo el nombre porque no estoy seguro de que le gustara que lo dijera). Cuando hace dos años le publicaron su primera novela, él estaba radiante, supercontento y rejuveneció 20 años jejejejeje . Estaba muy ilucionado porque se suponía que le iban a promocionar al máximo, publicaba con uno de las editoriales de Planeta, no recuerdo cual es, pero una importante. La cosa es que la han dejado de lado, promoción «0», ningún seguimiento, nada de nada de nada. Cero patatero. Él me comentó que le parecía superraro porque las condiciones que firmó eran de un buen anticipo, le pagaron casi 7000 euros, según me dijo cuando le ha llegado la nota con las ventas, éstas no superaron las 500 en papel y las 80 en digital. Está muy mosqueado, porque de donde es él, en un pueblo de Girona, cerca tiene una librería enorme ¡¡¡y hasta un año después no vio un libro de él!!!. ¿Cómo se entiende que le pagaran tanta pasta y después pasaran tanto del tema?
No tiene lógica que le pagaran tanto si creyeran en su obra y después según parece ni 1000 libros sacaron a vender, ¿no? ¿Por qué hicieron eso?
Abrazos!!!!!!!!!!
Hola Calixto. Gracias por visitar mi blog y comentar.
Porque habrán pensado que el libro funcionaría (esto seguro sino no hubieran pagado ese adelanto ni firmado un contrato de edición) y si a los pocos meses no es así… «pase el que sigue, que la rueda debe continuar girando».
Si dice que han vendido 500 libros impresos en un año, con seguridad han impreso más de mil ejemplares, ya que se necesita una cantidad superior para que los ejemplares roten en las librerías. Cuando un sello pertenece a un gran grupo editorial la mecánica es diferente a la de una editorial mediana o pequeña: tienen una estructura y una rotación de títulos que mantener distinta; si un título no funciona se pasa al siguiente y así. Personalmente, una editorial mediana o pequeña cuida más al escritor y puede ofrecerle más dedicación. Un saludo.
Él se quejaba de que le llegaban emails a su web y mensajes a su facebook de que no habían libros en su ciudad, y también de que el mismo día que salió el libro a la venta le llamaron desde la editorial una persona que parece que se dedica solo a promocionar y eso, preguntándole si se le ocurría algo para promocionar su obra A COSTE CERO. Eso dice que le hizo ponerse en guardia, porque para vender hay que invertir dinero en publicidad, marketing, etc, y no a coste cero precisamente, si quieres sacar 2 € tienes mas probabilidades de sacarlos si antes has invertido 1 en dara conocer tu marca (y eso lo digo yo que trabajo como comercial de una marca de prótesis dentales -extrapolo mi experiencia a este caso particular-).
Es obvio que creerían en ese libro porque si no no hubieran invertido ese anticipo en él, pero ¿cómo pretendían que una obra triunfe si no se ve en los escaparates???? Es imposible!!!!
Yo por mi trabajo viajo mucho, y en ese año en particular estuve en más de 30 ciudades españolas tranquilamente, y te puedo asegurar que siempre, siempre, entraba en alguna librería, corte inglés, casa del libro, etc para preguntar por el libro de esta autora amiga, y lo raro era que me dijeran que había algun ejemplar. ¡¡¡En casi ningún sitio había algno!!! Yo me indignaba, y los solía pedir jejeje
No entiendo la política de esas editoriales. Recuerdo escuchar a mi madre y a un poeta malagueño muy importante, muy amigo suyo, en las largas charlas de verano n en la casa de verano que teníamos en Reus, hablar y hablar y hablar sobre el editor de éste, sobre libros, sobre el mundo del libro, anécdotas sobre Delibes (de quien era muy amigo este poeta)… y me da la sensación que aquellos editores sí eran editores de verdad… con toda la fuerza de esa palabra. Hoy en día me parece que son más matemáticos o economistas…
Sigo sin entender muchas cosas…
Y luego muchos autores quieren a toda costa publicar con Planeta… Los enviaré a leer estos mensajes Calixto 😉
Ya lo dice el refrán: «Mejor ser cabeza de ratón que cola de león»…
He leído atentamente el post y todos los comentarios y me gustaría darle la enhorabuena por su web. A parte de eso, querría preguntarle, ¿me podría dar ejemplos de lo que para usted son editoriales pequeñas o medianas? O, ¿cuales son, bajo su criterio u opinión las editoriales que tratan mejor a los escritores?
Gracias por su atención, y reitero la enhorabuena.
Hola Rosalía. Prefiero no dar nombres de editoriales para no dejar fuera de la lista muchas de ellas. Para «medir» si una editorial es pequeña y/o mediana hay que considerar la cantidad de obras que publican, los empleados y colaboradores que poseen, la facturación anual, entre otras variables. Sobre este punto puedes encontrar más información en Informes sobre el comercio de libro en España.
Saludos y muchas gracias por visitar mi blog.
Mariana Eguaras, yo no seré quien discuta su experiencia o su legitimidad para entrar a valorar sobre las editoriales, faltara más, pero yo llevo más de 35 años trabajando en el sector editorial y he de decir que algunas de las cosas que usted dice aquí, no son más que tópicos del mundillo, en algunos casos, y medio informaciones en otros.
Ejemplos:
En contestación a Calixto yo diría que lo que le ocurrió a su amiga o amigo escritor es un caso bastante «extraño» pero no por ello infrecuente. Normalmente esos barómetros de anticipo son elevados incluso para escritores con trayectoria, por lo que deduzco que su autor lo es. Empezando por ahí. Normalmente se está pagando de anticipo, para un autor con varias novelas en el mercado, en editoriales con distribución aceptable, de 500 a 3000 € ( como mucho), siendo más normal la horquilla 1500 – 2000 €. Por lo que deduzco que en el caso que cuentas, y por los pocos datos que cuentas, esa novela fue contratada por uno de los sellos de Planeta antes de la reestructuración mercantil de la empresa a mediados finales de 2011, y le prometerían promoción y apoyo para ser un boom el año de su publicación, y se encontrarían a fecha de la misma conque fue desestimada por los de «arriba» para el empujón. Dicen bien, cuando refieres que a coste cero promoción cero. Yo tengo una amiga que trabaja en publicidad que siempre me pone un ejemplo: para la novela de Falcones, «La Catedral del Mar» se gastaron una millonada para hacerla un bestseller, y lo sabe bien, porque ella fue parte de ese proyecto… ella comenta que no hay milagros, si no invierten, hoy en día no triunfan. Mi experiencia también me dice que si no hay libros, muchos libros, en las librerías, no hay nada que hacer. El boca oreja, el famoso boca oreja no funciona sino hay libros detrás. 1000, 2000, 3000 libros en España, repartidos por toda la geografía, no son nada.
Con respecto a los tamaños de las editoriales, Rosalía, decirte que la estructura de las grandes editoriales ha cambiado mucho con relación a cuando yo empecé. Muchísimo. Hoy e día hay sellos en el Grupo Planeta, por ejemplo, que son un despropósito para el autor, pongo de ejemplo Martínez Roca, que en su catálogo podemos encontrar verdaderas maravillas, y verdaderas mier… Y es sólo un ejemplo, hay más en el mismo grupo. Por el contario, en el mismo grupo hay otros sellos, como Crítica que suele funcionar bastante bien con sus autores, y que están relativamente contentos. Hay de todo. En Random House ocurre lo mismo, pero quizá no es tan acusado el contraste dentro de los mismos sellos de la mercantil.
De las llamadas editoriales medianas, las que trabajan muy bien con los autores (me consta) son por ejemplo, Siruela, Salmanadra, Anagrama (aunque últimamente no parece ir bien las cosas, desde que los rumores la acercan a los «grandes»); y otros no tan bien como Ediciones B o Roca Editorial. De Tusquets, prefiero no hablar ….
De las llamadas pequeñas, hay muchas (siempre te hablo desde mi experiencia y conocimiento), en las que el autor es, al igual que en las grandes, un mero trabajador, hablo de Maeva, Almuzara, Lengua de trapo y alguna más. Pero hay otras pequeñas editoriales que han sabido bien labrarse un hueco de calidad, en el sentido humano, como son el caso de «El sexto Piso», «Salto de Página», o El Aleph.
De todas maneras Rosalía, debes saber, que cada escritor y cada circunstancia puede ser distinta. Y hay muchas variables a tomar en cuenta a la hora de decidirse a contratar o publicar con una u otra editorial (si es el caso de que el escritor pueda decidir). A veces, como suscriben más arriba, mejor ser cabeza de ratón que cola de león, pero en otras muchas, no.
Un saludo para todos.
:-O Guau! Gracias por la información Robben, superinteresante!!
Mariana Eguaras, yo no seré quien discuta su experiencia o su legitimidad para entrar a valorar sobre las editoriales, faltara más, pero yo llevo más de 35 años trabajando en el sector editorial y he de decir que algunas de las cosas que usted dice aquí, no son más que tópicos del mundillo, en algunos casos, y medio informaciones en otros.
Ejemplos:
En contestación a Calixto yo diría que lo que le ocurrió a su amiga o amigo escritor es un caso bastante «extraño» pero no por ello infrecuente. Normalmente esos barómetros de anticipo son elevados incluso para escritores con trayectoria, por lo que deduzco que su autor lo es. Empezando por ahí. Normalmente se está pagando de anticipo, para un autor con varias novelas en el mercado, en editoriales con distribución aceptable, de 500 a 3000 € ( como mucho), siendo más normal la horquilla 1500 – 2000 €. Por lo que deduzco que en el caso que cuentas, y por los pocos datos que cuentas, esa novela fue contratada por uno de los sellos de Planeta antes de la reestructuración mercantil de la empresa a mediados finales de 2011, y le prometerían promoción y apoyo para ser un boom el año de su publicación, y se encontrarían a fecha de la misma conque fue desestimada por los de «arriba» para el empujón. Dicen bien, cuando refieres que a coste cero promoción cero. Yo tengo una amiga que trabaja en publicidad que siempre me pone un ejemplo: para la novela de Falcones, «La Catedral del Mar» se gastaron una millonada para hacerla un bestseller, y lo sabe bien, porque ella fue parte de ese proyecto… ella comenta que no hay milagros, si no invierten, hoy en día no triunfan. Mi experiencia también me dice que si no hay libros, muchos libros, en las librerías, no hay nada que hacer. El boca oreja, el famoso boca oreja no funciona sino hay libros detrás. 1000, 2000, 3000 libros en España, repartidos por toda la geografía, no son nada.
Con respecto a los tamaños de las editoriales, Rosalía, decirte que la estructura de las grandes editoriales ha cambiado mucho con relación a cuando yo empecé. Muchísimo. Hoy e día hay sellos en el Grupo Planeta, por ejemplo, que son un despropósito para el autor, pongo de ejemplo Martínez Roca, que en su catálogo podemos encontrar verdaderas maravillas, y verdaderas mier… Y es sólo un ejemplo, hay más en el mismo grupo. Por el contario, en el mismo grupo hay otros sellos, como Crítica que suele funcionar bastante bien con sus autores, y que están relativamente contentos. Hay de todo. En Random House ocurre lo mismo, pero quizá no es tan acusado el contraste dentro de los mismos sellos de la mercantil.
De las llamadas editoriales medianas, las que trabajan muy bien con los autores (me consta) son por ejemplo, Siruela, Salmanadra, Anagrama (aunque últimamente no parece ir bien las cosas, desde que los rumores la acercan a los «grandes»); y otros no tan bien como Ediciones B o Roca Editorial. De Tusquets, prefiero no hablar ….
De las llamadas pequeñas, hay muchas (siempre te hablo desde mi experiencia y conocimiento), en las que el autor es, al igual que en las grandes, un mero trabajador, hablo de Maeva, Almuzara, Lengua de trapo y alguna más. Pero hay otras pequeñas editoriales que han sabido bien labrarse un hueco de calidad, en el sentido humano, como son el caso de «El sexto Piso», «Salto de Página», o El Aleph.
De todas maneras Rosalía, debes saber, que cada escritor y cada circunstancia puede ser distinta. Y hay muchas variables a tomar en cuenta a la hora de decidirse a contratar o publicar con una u otra editorial (si es el caso de que el escritor pueda decidir). A veces, como suscriben más arriba, mejor ser cabeza de ratón que cola de león, pero en otras muchas, no.
Un saludo para todos.
:-O Guau! Gracias por la información Robben, superinteresante!!
Hola Robben.
Sí, tienes razón, puede que yo hable de determinados tópicos, aunque por algo lo son ¿no? (igual pasa con los estereotipos). Y, con seguridad, hay informaciones a medias, ya que para abordar el tema de modo amplio y profundo tendría que dedicarme solo a escribir para el blog y, claro está, es algo que no puedo permitirme.
Solo unas pocas pinceladas:
– He analizado contratos donde se ofrece 4.000 € o más de anticipo a escritores que van a publicar su primera novela en papel;
– El boca-oreja sí funciona, no solo y sin promoción, pero sigue funcionando y bien. La promoción proviene de alguien que quiere venderte algo (en este caso un libro), el boca-oreja proviene de quien consume ese algo y cada vez se valora más la opinión del lector (la legitimidad en la prescripción ha cambiado);
– «para gustos los colores», hay público para todos las obras: el libro que para una persona es maravilloso para otra puede ser un soberano tostón intragable; y los libros que no son una maravilla también tienen salida, ofrecen horas de lectura, de distracción, etc. y si se compran es porque hay público que los consume.
Coincido plenamente en que cada escritor y cada circunstancia son distintas, y agrego que cada editor también lo es.
Muchas gracias por toda la información y por visitar mi blog.
Buenos días Mariana,
tienes toda la razón, los tópicos están ahí porque, como decía el gran Baltasar Gracián, los tópicos es saber usar el desliz, y es el desempeño de los cuerdos. Pero no es la regla general, al igual que cuando dice que a autores noveles le pagan esos anticipos. Yo, y siempre le hablo desde mi experiencia, le digo que esos casos son los más infrecuentes y va a menos, ¡pero claro que los hay! El boca oreja no funciona sin promoción, no funciona a niveles aceptables de éxito. Es imposible. ¿Habrá algunos caso excepcionales? No. ¿Nos han vendido algunos casos como excepcionales?, sí. Cuando salió el «Niño de pijama de rayas», hubo un bulo que saltó casi inmediatamente en muchos medios y foros en el que decían, más o menos, que un desconocido había publicado en un soporte editorial de autopublicación una novela que había vendido tanto tanto que el «boca oreja» había hecho que una importante editorial de su país apostara por el libro y bla bla bla bla… todo era una gran maniobra publicitaria y de promoción orquestada con el fin de hacer un éxito de ese libro. En muchos casos funciona, en muchísimos otros no. Lo que siempre funciona es el cuento del «patito feo», o el de «la cenicienta»…
¿Sabes?, te voy a aportar una experiencia personal sobre «gustos los colores». En 1986-7 me llega una traducción al despacho de la editorial de un autor anónimo (antes siempre en el departamento de lectura te ocultaban el nombre para no acondicionarte a la hora de tu informe, ahora casi nunca, ahora lo primero que miran es el nombre, ventas, etc…). Yo lo leí, no me gustó especialmente, ni me gusta ahora, pero tenía cierta calidad y era original, etc.., di mi informe favorable a su publicación, dos de mis compañeras también lo leyeron y dieron también su voto favorable. Pero también se lo leyó el editor y dijo, textualmente, ente otras muchas cosas: «otra mariconada de los sudamericanos» (textualmente, que nadie se ofenda por favor). Esa mari…. era «El Alquimista» de Paulo Coelho. Desgraciada y lógicamente no lo publicó la editorial, y el tiempo ha demostrado que fue una desacertada decisión. Pero eso no quita que el editor fuera honesto y se dejara llevar por un criterio editorial propio; sobre todo no hizo números antes de decidir si sí o si no. Hoy en día, antes son los números y después el criterio. O si no que se lo pregunten a los responsables de grandes grupos cuando publican libros a Belén Esteban o Mario Conde; ¿le preocupan la calidad de sus escritos o que la caja les va a rebosar?…bueno en esos casos, la promoción y la publicidad la tienen asegurada y es casi gratis… Pero eso es otro tema.
Excelente su blog, y gracias por dejarme comentar en su blog.
Un saludo.
Para que una obra «funcione» o tenga «éxito» tienen que confluir muchas variables: que el libro interese a un determinado público, que posea una calidad aceptable en función del público (y digo en función del público porque la prosa del libro de Belén Esteban no es la misma que la de Cortázar), que ese público hable del libro (boca-oreja, comentarios en foros, redes, etc.), que haya promoción y bien hecha, que el autor colabore y un larguísimo etcétera que conocerás muy bien.
Hay personas que se mosquean cuando hablo de producto en referencia al libro, pero aunque sea un producto cultural no por eso deja de serlo y es el producto del que viven las editoriales (que son empresas y tienen que ser rentables para seguir adelante). No veo mal que las editoriales publiquen determinados libros para aumentar la caja y con ello puedan darse el gusto, también, de publicar libros que le gustan al editor o a quien toque, o que publiquen obras exclusivamente comerciales, están en todo su derecho… Se ha ensalzado (y se ensalza) tanto la labor cultural y social de la edición -que lo tiene-, que a veces se olvida que también es una industria, y son todos aspectos que deben confluir. Como bien dices tú, hoy priman los números, la maquinaria industrial está primero.
Gracias a ti por compartir en mi blog tu experiencia y opinión. Un saludo.
Sólo una puntuación a tu reflexión, el ratio de beneficio no se mide en la cultura por la «caja», sino por la evolución positiva de la misma. Que editoriales publiquen determinados libros para aumentar la caja y con ello puedan darse «el gusto» de publicar libros que le gustan al editor o a quien toque es un contrasentido, una involución. No creo que eso sea del todo cierto. Sólo a editoriales mediocres, que no pequeñas, les puede beneficiar ese tipo de «negocio».
No veo a Anagrama, Salamandra, o a Siruela publicando a Belén Esteban, o la biografía de Amador Moedano… por ejemplo…
Buenas tardes tengo una duda y he buscado y demás, realice un libro con otra persona y quedamos en un 50% sobre el contenido la situación es que la editorial no nos realizo ningún contrato y cada termino de semestre la editorial tiene que pagar las regalías por dicho libro, pero la situación es que no quiere pagarme y pues esto es siempre. Por favor auxiliarme con esto para saber a dónde tengo que ir o que se puede hacer.
Me temo que no podrás hacer mucho más que seguir reclamando porque si no has firmado un contrato no tienes herramienta legal con la cual exigir que te paguen.
Excelente post y excelente blog. Me adscribo. Un saludo, Mariana, y gracias por compartir tu sabiduría y tu experiencia.
Gracias a ti, Guillermo, por visitar mi blog, leerme y suscribirte 🙂
Estupendo el blog! de veras que para los que se quejan de los tópicos, les pediría un sitio donde las editoriales expliquen claramente la estructura de pago que tan claramente describes aquí. Perdona pero si tienes información sobre las publicaciones vía amazon te lo agradecería. Creo (y esto puede ser también un tópico) que la auto edición vía amazon puede ser una pedrada en el ojo para las editoriales tradicionales pero quisiera saber tu mejor criterio (y el de los lectores que tengan experiencias con ello). Mucha gente me dice que esto está bien para Estados Unidos pero que en España no arranca. Tú cómo lo ves? mil gracias !
Todo es relativo, Eric, y está repleto de matices. No son temas sencillos para dar una respuesta en pocas líneas y, además, todo varía según las necesidades y expectativas del autor. Gracias por comentar y visitar mi blog.
Hola.
Me gustaría saber: ¿cómo sabe el autor que no le toman el pelo y aparte de los ejemplares que se van a editar, según firmado en contrato, el editor no edita más por su cuenta?; ¿O esto queda reflejado en algún sitio para que no haya fraude?
Perdón por mi ignorancia. En estos temas estoy totalmente pez.
Me parece muy útil este blog.
Gracias por todo.
Saludos.
Hola, Esteban:
La cantidad mínima y máxima de ejemplares a publicar se estipulan en el contrato de edición, por ejemplo: «(…) para la primera edición un mínimo de mil (1.000) ejemplares y un máximo de doscientos mil (200.000) ejemplares, y para las siguientes ediciones un mínimo de cincuenta (50) ejemplares y un máximo de doscientos mil (200.000) ejemplares (…)».
La confianza en el editor es la única alternativa, ya que no existe un sitio antifraude como el que planteas. El autor está sujeto a las liquidaciones que las editoriales entregan al autor una vez al año; puede confiar en ellas o no (hay autores que no lo hacen e intentar hacerse con un informe Nielsen que, no es «palabra de santo» pero muy equivocado tampoco está; esto si la editorial trabaja con Nielsen BookScan).
Solo el editor y el impresor saben la cantidad de ejemplares que imprimen de un libro. Siempre puedes exigir que te entreguen un certificado de impresión para saber cuántos ejemplares se han impreso de tu libro. Eso no garantiza, por otro lado, que sea la cantidad que se distribuya y, menos aún, la cantidad de ejemplares que se venda.
Como verás, no queda otra que confiar en el editor, por eso hay que saber elegirlo muy bien de antemano y asesorarse antes de firmar un contrato de edición, para no darse la cabeza contra la pared después…
Saludos. Gracias por visitar el blog y comentar.
Me alegra mucho haber encontrado este blog en la web. Tengo una duda, leí varias Entradas y no logro entender si el «Anticipo» es solo un anticipo y luego viene más; o significa todo lo que vas a cobrar por una tirada completa.
Desde Uruguay, muchas gracias.
Hola, Pao. El anticipo es una suma que la editorial paga al autor como adelanto de las ventas (estimadas) que tendrá su libro.
Es una suma que corresponde al autor de una obra en concepto de derechos de autor y que la editorial le paga, por lo general, al momento de firmar el contrato de edición. Luego, cuando el libro se publica y comienza a venderse un porcentaje de esas ventas son para el autor.
El autor no recibirá más dinero de la editorial hasta que esos porcentajes no cubran el anticipo; una vez superada la cifra del anticipo el autor recibirá el porcentaje que haya acordado con la editorial por la venta de su libro (8%, 10%, etc.).
Esto se ha hecho así durante.mucho años; últimamente algunas prácticas están cambiado, pero una editorial tradicional continúa trabajando de esta forma.
Espero haber sido clara y haberte ayudado a despejar dudas.
Gracias por descubrir el blog y leerlo 🙂
Más claro imposible. Muchísimas gracias.
Hola Mariana.
Decirte que estos dos posts que has escrito son extraordinarios y de gran utilidad igual que los comentarios y cómo respondes a todos. ¡Magníficos!
Hace poco envié uno de mis manuscritos a probar suerte con editoriales. Para mi sorpresa, a la segunda semana ya tenía varias ofertas sobre la mesa. Aunque tengo que decir, que todas ellas eran de parte de editoriales pequeñas.
Entre estas ofertas hay una que me ha llamado especialmente la atención porque en el contrato que me enviaron (muy rápidos ellos) ponía expresamente que tan sólo publicarían mi obra en formato impreso. Enseguida me puse en contacto con ellos y les pregunté si entonces, en el supuesto caso de que decidiera firmar, puesto que ellos sólo explotarían la obra en papel, si cabía la posibilidad de que yo pudiera publicar y vender digitalmente por mi cuenta. Al poco recibí respuesta a esta cuestión y, para mi sorpresa, fue rotundamente afirmativa.
A lo que me surge la duda y es aquí donde solicito tu ayuda: ¿Esto puede ser? ¿Puede ser que una editorial decida publicar tan solo en papel y le permita al autor explotar la obra digitalmente por otras vías?
A mi me suena extraño y es por ello que me hace desconfiar.
Muchísimas gracias de antemano
Hola, Lara:
Antes que nada, gracias por tus palabras hacia mi blog 🙂 Me alegro que mis entradas sean de utilidad, esa es una de sus finalidades.
No es lo más habitual lo que comentas, pero puede suceder. Tal vez sea una editorial que sigue apostando exclusivamente por la versión del libro impreso, pero sin por ello dejar de limitar al autor. Está comprobado que la edición en digital potencia la venta del libro en papel y viceversa. Todo esto siempre que no se trate de una editorial de autoedición…
Saludos y gracias por comentar.
Hola Mariana, gracias por contestar tan rápido.
La editorial de la que te hablo antes sí trabajaba con coedición. Sin embargo, según especifican en su contrato eso ya dejaron de hacerlo hace unos años y ahora se hacen totalmente cargo de todos los gastos de publicación… Si bien, las tiradas que hacen son pequeñas y además van muy ligadas a lo que se venda en la Presentación -otro detalle que hace que me pique la nariz-
Por ahora tengo bastante claro que prefiero esperar a recibir otras ofertas, más que nada porque, como comenté, la respuesta de estas tres (Atlantis, Seleer y Seimas) ha sido casi inmediata y no termino de convencerme.
Pero vamos, que eso de que pueda vender por mi cuenta digitalmente mientras ellos explotan el formato papel-en el caso de que lo hagan, que a lo mejor luego es una chafarda- me parece interesante.
Gracias de nuevo
Ahora que mencionas a las editoriales puedo asegurarte que son de autoedición o coedición. Es decir que tarde o temprano tendrás que pagar para que publiquen tu libro: sus servicios o los ejemplares que te obligarán por contrato comprar. Por eso solo les interesa publicar en papel, porque su negocio es la impresión de ejemplares y como por contrato te obligan a comprar X ejemplares, la editorial sale hecha; no hay criterio de publicación sino que publican todo aquello que llegue a sus manos y el autor pague.
Vaya.
Ya decía yo que era demasiado bueno para ser verdad.
Muchas gracias por aclarármelo.
Saludos
Mariana, estoy a punto de editar un libro de poemas y me intereso mucho su publicacion, muchas gracias por esa informacion y los consejos, todavia no tengo editor, pero poir supusto que va a ser como «Self publishing». hay algun consejo que pueda darme sobre esto? Muchas gracias.
Hola, Miguel. Los consejos podrían ser tantos que exceden la capacidad de un comentario. Sin embargo, y a modo general, sugiero que leas y te informes de cómo funcionan las distintas plataformas y la experiencia de autores que ya han publicado por su cuenta antes de lanzarte a autopublicar. En la red hay muchos recursos para autores que publican por su cuenta.
Un saludo. Gracias por visitar el blog y comentar.
Mariana Nosotros somos una distribuidora de Libros Impresos en los Estados Unidos,hemos palpado desde hace algun tiempo el creciente interes por los libros digitales.
De ser distribuidores de libros Impresos queremos dar el paso para distribuir libros digitales,entendemos que debemos gestionar Derechos de Autor para producir nuestros propios titulos y poderlos comercializar,que consejo nos podrias dar para comenzar en esta nueva etapa.
Gracias Por Tus Consejos y Felicidades por Tus interesantes comentarios.
Roger
Hola, Roger:
Mi consejo es que te asesores muy bien antes de comenzar. Trabajar con libros impresos es muy distinto a hacerlo con el digital. Por otro lado, ser distribuidor digital no te obliga a producir títulos por ti mismo, a menos que también quieras ser editorial. Por supuesto, tienes que gestionar derechos y sobre esto asesórate muy muy bien.
Saludos.
Mariana, busqué una entrada que se relacione con una duda que tengo acerca de publicar y esta es la que más se acerca. Una editorial a la que ofrecí un escrito para publicarse me responde que le ven al tema pocas posibilidades de venta y que por lo tanto no pueden publicarlo, pero finalizan ofreciéndome publicarlo solo en caso de que yo cargue con el costo de una parte de la edición.
Agradecería mucho tus comentarios al respecto.
Saludos.
En este enlace encuentras entradas sobre este tema, mi opinión y la de muchos autores. Saludos.
Muchas gracias Mariana, ya lo estoy revisando. me parece haber visto el tema de coedición, pero desconocía que era esto lo que buscaba.
Hola, quisiera saber qué ocurriría en caso de que se publicara el libro antes de firmar el contrato por contratiempos de quien escribió la obra (es decir, llegó la fecha de la publicación, el libro ya está en venta pero el contrato no se ha firmado). ¿Traería esto consecuencias legales?
No, en tanto una parte no denuncie a la otra. Sin contrato ambos están desamparados legalmente hablando, más el editor, que está ejerciendo unos derechos que no tiene.
Si publicó una especie de enciclopedia musical ¿debo pagar derechos a cada disquera cada artista cada pagina web o medio de información reseñado? Como se hace con el caso particular de una enciclopedia por ejemplo…Muy buena tu página y gracias por leerme.
No sé a qué se refiere con «reseñar». Si es mencionar, no, no debe pagar; pero si va a usar imágenes de portadas de discos, artistas, partituras, etc., sí tendrá que pagar por los derechos correspondientes para no tener problemas legales. También puede dirigirse a las entidades de gestión colectiva de su país, que son las que cobran por obras donde participan varios autores.
Cuando trabajo con enciclopedias lo que hacemos es generar los contenidos desde cero o bien comprar las imágenes a los bancos de imágenes con los que tenemos algún tipo de acuerdo y así nos ahorramos gestiones.
Saludos.
Gracias porsu pronta y acertada respuesta. Por reseñar me refiero a redactar una información biográfica sobre el artista en cuestión y necesito acudir a su bografia oficial o a las páginas especializadas o reportajes realizados.
Gracias de nuevo, es usted muy amable.
En este caso no hace falta que consiga derechos o solicite autorización alguna, porque lo que usted está haciendo es documentarse con varias fuentes y generar un contenido original, que es lo que usted escribe. Distinto es si, por ejemplo, quiere ilustrar con la portada de un disco de un cantante; ahí habría que averiguar si aplica algún derecho. Saludos.
Tengo una duda , si ya se firmó el contrato y al 3 mes como se estipiló me envian el informe de ventas de la 1 tirada y $0 , además, deciden anular el contrato no tengo derecho por lo menos a algo por derecho de autor ?
Sí firmaste un contrato donde no se estipuló un anticipo y no hay ventas de tu libro no te corresponde ningún dinero en concepto de derechos de autor.
Muy buena información. Tengo una duda acerca de la publicación de un libro en el caso de que gane un concurso: la promoción dice que el premio es de X (muchos) Euros, que se pagarán al ganador en concepto de anticipo…
Mi pregunta es (en el sitio del concurso no me han respondido aún) si en el caso de «un certamen» y que se publicite como «el premio», esto se entrega en una única vez.
No alcanzo a comprender la pregunta, María. Pero el anticipo siempre es uno solo y es a cuenta de ventas futuras. Puedes leer sobre este tema en esta entrada. Concurso, certamen, competenciaes lo mismo con diferente nombre.
Muchas gracias, Mariana, muy interesante y fácil tu contenido.