En una entrada anterior comentaba las tipografías gratuitas que ofrece Google Fonts y que pueden utilizarse tanto para páginas web y blogs como para maquetar libros y publicaciones impresas. Caso similar encontramos en Font Squirrel.
Font Squirrel es una página que recopila tipografías gratuitas y libres para uso comercial.
En la ficha de cada fuente que hay en Font Squirrel encontraremos el tipo de licencia que ofrece cada una.
La gran mayoría de las fuentes admiten todos los usos: archivos digitales, como ebooks y PDF; incrustación en aplicaciones, software y páginas web, y gráficos y documentos comerciales.
Sin embargo, si empleas alguna de las tipografías gratuitas que se encuentran en Font Squirrel para un libro impreso, lo mejor es asegurarse que la fuente que selecciones posea el primer icono (el de la pantalla de ordenador), que corresponde a documentos comerciales, donde se encuadran los libros.
Si vas a usarla en un PDF o un libro digital MOBI y/o EPUB, el icono de la tableta. Si eliges una tipografía que tenga ambos iconos podrás emplearla en todos los formatos que quieras darle a tu obra.
Resulta muy fácil buscar una fuente en Font Squirrel porque están organizadas por tipo (display, serif, sans serif, caligráficas, etc.) y por etiquetas. Las etiquetas son especialmente útiles porque indican el uso idóneo de una tipografía.
Otro recurso de esta página web que me encanta es que cada tipografía se puede probar. Solo tienes que poner el texto que quieras en Test Drive (dentro de cada ficha de la tipografía).
Para textos largos
Como novelas, cuentos, relatos varios, tesis, etc. hay tipografías gratuitas que quiero destacar. En varias entradas de este blog podrás leer por qué escojo tipografías serif para textos largos.
Algunas fuentes son muy legible y bonitas, pero hay que asegurarse de que posean suficientes variantes o estilos. Es decir, que posean al menos el estilo Regular, Italic, Bold y Bold Italic.
Me gustan Calluna, Cardo, Ashbury y Erato, entre otras, pero presentan el problema descrito en el párrafo anterior. Esto es una limitación si en el texto hay palabras que deben escribirse con negritas y/o cursivas. (Y con gran seguridad que en un texto hay alguna palabra en cursivas).
Algo a favor de todas ellas es que soportan decenas de idiomas y tienen una extensa colección de glifos.
Sí cumplen el requisito mencionado las siguientes tipografías gratuitas: Borgia Pro, Crimson Text, Gandhi Serif, Gentium Basic (8 estilos), Heuristica, Liberation Serif, Lora. Esta es mi selección, aunque hay más.
Para títulos y textos cortos
En estos casos, podemos recurrir a tipografías con serifa no tan legibles en textos largos. También es la oportunidad perfecta para decantarse por tipografías sans serif y dar un poco de juego al diseño del libro, sobre todo en la cubierta y contracubierta.
En este punto hay más alternativas y la elección depende del objetivo del texto (informar, entretener, etc.), del tipo de libro (ficción o no ficción), de la temática del título, etc.
Open Sans, PT Sans y Source Sans Pro son fantásticas y ofrecen mucho juego tipográfico, al igual que Raleway (la tipografía utilizada en los títulos de las entradas de este blog).
Por ejemplo, Play se prestaría a ser empleada si el libro trata de informática o la trama aborda cuestiones relativas a los ordenadores (pero, cuidado, no tiene versión Italic). En este punto, la subjetividad está a la orden del día.
Páginas del libro El año de tu vida, maquetación para Amazon KDP.
Podrás visualizar con más detalle el ejemplo en este PDF.
Estas tipografías gratuitas también sirven para editar cualquier tipo de documento y para crear piezas gráficas (marcapáginas o señaladores de libros, tarjetas de visita, catálogos, etc.).
Cualquier profesional —se dedique a la profesión que se dedique— necesita producir textos y diversos contenidos. Por ejemplo, informes, envíos de prensa, dosieres y presentaciones para su trabajo, sus clientes o alumnos.
Buen aporte, la tipografía que se usa en casi todas las webs actuales es la Open Sans y sus variantes. No sé si es porque es la que viene por defecto en la mayoría de las plantillas compradas, o porque está de moda.
La verdad es que uno al final se cansa de ver este tipo de fuente, ya que da la sensación de ver «clones» por todas partes.
Es cierto que en muchas páginas web se utiliza Open Sans o Source Sans y similares. Entiendo que es porque son tipografías bien legibles en pantalla, gratuitas y además se pueden embeberse en las webs. Confieso que prefiero estas a unas fuentes muy finas que los ojos tienen que incrustarse en la pantalla para leer ?
Gracias, Fronty, por visitar el blog y comentar.