Existe la ilusión de que la edición de libros y la literatura son la misma cosa. Solemos hablar de literatura cuando en realidad queremos decir edición, y viceversa.
Decimos que algo es literario cuando puede no serlo, porque pertenece a la esfera de la edición de libros, pero no al ámbito de la literatura.
La edición puede ser literaria, pero no necesariamente. Hay mucha edición de libros, mucha vida editorial, más allá de la literatura. Por tanto, y sobre todo en un entorno profesional, creo interesante distinguir entre edición y literatura.
El dicho popular dice que «para muestra vale un botón». Y he aquí una. A medida que cursaba el Máster en Edición de la Universitat Pompeu Fabra me di cuenta de que era un máster sobre edición literaria, enfocado específicamente en obras de ficción.
En todo un año lectivo, solo dos horas se dedicaron a la edición de libros de texto, otras dos a la edición de libros ilustrado, y no recuerdo contenido alguno sobre edición técnica o científica.
Por esto, aprovecho esta entrada para escribir sobre la diferencia entre edición y literatura, y para reivindicar la otra edición: la no literaria.
Tipos de edición y de edición de libros
Una característica que se da es que edición es una palabra amplia que engloba multitud de acepciones. Por eso es necesario aclarar el tipo de edición: edición de libros, edición de videos, edición de imágenes, de audios, etc.
También utilizamos edición para referirnos a un nuevo evento que se repite periódicamente. Por ejemplo, «quinta edición de la feria», «tercera edición del premio», etc.
Otro ejemplo. Word e InDesign permiten editar estilos; es decir, dar forma, formatearlos, modificarlos a gusto del usuario. También permiten editar tablas, gráficos, esquemas, índices, fuentes y bibliografías, etc.
Luego, dentro del área de la edición de libros, encontramos que a las distintas modalidades de una obra también las llamamos edición.
Así, tenemos: edición anotada, edición comentada, edición de bibliófilo, edición de lujo, edición ilustrada, edición bilingüe, edición conmemorativa, edición abreviada, edición en tapa blanda, y un largo etcétera.
Pero, además de las modalidades, también empleamos edición para hablar de la perspectiva desde la que se interviene un contenido.
De este modo, hablamos de edición técnica, edición científica y edición académica. Tres tipos de edición que de literatura tienen poco y de edición muchísimo.
Edición de libros no literaria
El trabajo de edición en los ámbitos científicos, técnicos y académicos es mucho más complejo que en el ámbito literario. Lo mismo sucede con la edición de los libros de textos escolares.
Por la naturaleza misma de la obra, las ediciones científicas y técnicas —en la que incluyo los libros y manuales empleados en la enseñanza y los producidos por las universidades— requieren de más procesos que una novela.
Los autores suelen ser varios y no uno solo, por lo que la coordinación editorial se vuelve imprescindible. Es muy probable que a lo largo del proceso de producción de la publicación intervengan más profesionales que si se tratara de un libro de ficción.
En referencia al contenido, en una novela intervienen (o deberían) un lector profesional, correctores y revisores y el editor.
En la edición no literaria, además de lo anterior, en la mayoría de los casos, se hace una revisión por pares. También una verificación exhaustiva de los contenidos de la publicación. A esto se suma la revisión bibliográfica, que puede llevar días de comprobación (y te aseguro que no exagero).
La fase de producción también es más compleja. La edición de tablas, gráficos, esquemas y cuadros implican un conocimiento y maestría por parte del maquetador que no son necesarios en una obra literaria.
Más complejo se vuelve aun cuando hay imágenes y necesitan retoque fotográfico. O se requiere la participación de infografistas o cartógrafos.
Observa la cantidad de libros no literarios que se editan bajo el paraguas de la edición científica y literaria: atlas; diccionarios; enciclopedias; libros de referencia, de texto, ilustrados y prácticos (de recetas, manualidades, guías de viaje, etc.); biblias y libros religiosos; manuales (de procedimiento, universitarios, etc.); memorias y anuarios; catálogos; tesis, tesinas y monografías.
En Publicar con calidad editorial – Cuatro pilares de la edición de un libro, precisamente, abordo este tipo de edición y sus complejidades.
Una breve historia personal
En Argentina trabajé en una editorial que publicaba revistas científicas y de divulgación científica. En una de las revistas se publicó una cifra errónea de una dosis de un medicamento.
La edición fue secuestrada y todos los ejemplares acabaron destruidos. El argumento de la dirección científica de la revista fue que no podía permitir que algún profesional de la salud consultara el artículo y se le ocurriera aplicar esa dosis, porque podía ser letal para el paciente.
Como te imaginarás, si en alguna novela sucede algo similar no habrá consecuencias. Puede atribuirse al desconocimiento por parte del autor de la especificidad del medicamento. También que se ha inventado la dosis, ya que la obra pertenece al universo de la ficción.
Un blog no literario
Algunas de las personas que me escriben creen que este blog es literario. No lo es: aquí no hay artículos sobre literatura o creación literaria. Creo que la única excepción es Propuesta de estructura para tramas literarias, por un evento al que asistí.
En este espacio no hay entradas sobre los distintos géneros literarios, la creación de personajes o la estructura de la narración. Ni sobre el tiempo del relato, los tipos de narrador o el desarrollo de tramas.
Tampoco hay reseñas de novelas, cuentos o antologías. Solo hay reseñas de libros relacionados con el trabajo editorial. ¿Por qué? Porque este blog trata sobre edición y publicación de libros y otras publicaciones, pero no sobre literatura.
En este blog hay entradas relacionadas con cómo se hacen los libros y cuáles son los procesos editoriales, no con «cómo se escribe un libro» o «cómo escribir una novela».
La edición de libros es una industria, la literatura no; la literatura es un arte. El sector de la edición de libros puede elegir a la literatura como materia prima para sus productos, pero también puede prescindir de ella. Por eso, edición no es sinónimo de literatura.
Mariana, gracias por el post. Creo que has dejado aclaradas las diferencias entre literatura y edición. Aprovechando que explicas este asunto, me gustaría hacerte una pregunta que hace tiempo que me intriga: ¿Es habitual que un corrector o editor cambie de camino y se convierta en autor? Y, si es así, ¿conoces algún caso significativo? Te planteo estas cuestiones porque pudieran darnos una idea de hasta que punto son «contiguos» esos senderos o si pueden llegar a cruzarse. Felicidades por tu post. Saludos.
Hola, Luis:
No sé si es habitual, pero son casos que perfectamente pueden suceder. Ahora bien, que un corrector o editor se convierta en autor, no significa que lo sea de textos literarios. Conozco correctores que también hacen edición, pero sé que no todos los correctores tienen esa capacidad. Hay libros de editores que cuentan sus memorias o sobre el oficio de editar y en este caso son autores. Por ejemplo Éric Vigne en El libro y el editor o Thierry Discepolo en La traición de los editores.
Los senderos que planteo son muy contiguos y se cruzan constantemente, de allí que los confundamos. 🙂
Gracias por tu comentario.
Gracias por esta interesante publicación. Trabajo en una revista de ciencias sociales y estoy muy de acuerdo con todo lo que planteas. En la edición científica el papel del editor es de mucha más responsabilidad, y los conocimientos que el editor tenga o sea capaz de buscar y verificar son muy importantes.
Sí, el editor técnico tiene muchas mas cuestiones en las que reparar que un editor literario. Esto no significa que uno trabaje más u otro menos, sino que es diferentes. Son áreas cercanas pero de dinámicas muy diferentes. Esto lo abordo en detalle en mi libro.
Gracias a ti, Juliette, por pasarte por aquí y comentar.
Aunque en gran medida me siento en desacuerdo con lo que propones en esta entrada, me resulta inspiradora; trataré de responderte con una entrada en mi blog. Debo señalar que, si bien parecieras dejar algunas cosas en claro, en realidad has contribuido a la confusión. Igual, te agradezco que des motivos a discutir. Saludos.
Espero la entrada en tu blog, entonces, Óscar.
Muy bien, Mariana. Muy clara tu entrada. Tengo una sola observación (que también la hago en el post con el que comparto tu entrada en mi Facebook. Y es la siguiente: QUE LA SECCIÓN DE LA IMAGEN CORRESPONDIENTE A LA «EDICIÓN LITERARIA» ESTÁ INCOMPLETA PORQUE TAMBIÉN COMPRENDE LA EDICIÓN DE POESÍA LÍRICA Y DE TEXTOS DRAMÁTICOS.
Muchas gracias por tu aporte, Julio. Tienes razón que me he saltado la poesía y los textos dramáticos. YA LOS HE AGREGADO AL ESQUEMA. 😉 Saludos.
Muchas gracias por explicar.
A ti por leer y pasarte por aquí.
Me ha sido de gran ayuda este articulo.
Mariana, buena tarde. ¿Cómo se puede tarifar un trabajo de edición? Los parámetros para los trabajos de corrección están claros y definidos, pero para edición no.
Depende del trabajo de edición que sea, Alexandra. Si es editing de texto puede tarifarse por página o por matrices. Si el proyecto incluye trabajar con varios autores, fotógrafos, coordinar la publicación, etc., se suele fijar una tarifa global y fijar un tiempo de ejecución.
Gracias Mariana por la aclaración. He dado con esta entrada de tu blog porque estoy buscando algo que creo recordar haber leido por aquí y ahora no doy con ello. Se trata de las editoriales (o entidades) que se dedican a publicar tesis, tesinas, proyectos de investigació… etc. Creo recordar que había editoriales o entidades que se dedicaban a editar y publicar proyectos de este tipo, y que solían estar libres de derechos… Algo así, pero en definitiva lo que quiero saber es donde se suele hacer más este tipo de publicaciones, si suelen estar financiadas por los mismos centros universitarios o de investigación, y si hay alguna estadistica sobre este tipo de publicaciones no-literarias. Puede ser que lo que leyera sobre el tema, era algo referido a una libreria virtual donde se puede acceder a este tipo de publicaciones científicas, tesis… Se que te pregunto algo muy ambiguo, y es que resulta que he leido muchas cosas de tu blog porque me está resultando muy útil para investigar sobre el mercado editorial, entre otras cosas, y ahora no me acuerdo donde lo leí. Y quiero informarme cual es el modo operandin de una persona que quisiera hacer un tipo de publicación cientifica, técnica, etc, y que entidades editoriales se dedican a cubrir esas necesidades. Gracias!!!
Te refieres a esto: EAE, que son un timo, así que sugiero te olvides de ellos. Es mejor que publiques la tesis por tu cuenta, porque perderás los derechos sobre ella al cedérselas a estas empresas. Ni siquiera hacen trabajo editorial, solo imprimen los libros. Entre esto y que subas tu tesis a Amazon no hay ninguna diferencia.
Hacer un libro, se trate de ficción, no ficción, una tesis o un libro científico es el mismo: edición, corrección, diseño y composición; vamos, lo que explico en mi libro y en esta entrada.
Idealmente, la misma universidad debería poder facilitar la publicación de las tesis, siempre que tengan un interés real para el tipo de lector al que publican. Saludos.
Síiiiii!!! Gracias Mariana, era ese post el que leí! Jeje, es que en las últimas 3 semanas he leído tanto en tu blog y otros sitos, que la cabeza me va a explotar, estoy algo saturada. Ahora lo he leido con más conciencia, y también los comentarios, vaya telita!! Mil gracias!!! Me encanta tu blog, es muy útil para gente como yo que está empezando, y tocas todos los temas del sector!!
Buen día! Viendo que esta entrada es bastante actual, quería aprovechar para preguntar: un Editor Literario (o no literario, no importa el género para mi pregunta) tiene sólo la tarea de recibir un manuscrito y ayudar al autor a mejorarlo, digamos? Porque sé que la «edición» también se puede relacionar, como mencionás en el artículo, con la maquetación, In Design y esas cosas, que sinceramente no me interesan. En tal caso, cuál sería la diferencia con un corrector literario? Porque nunca me termina de quedar claro, y la verdad que siempre voy encontrando respuestas muy variadas y confusas.
Pregunto porque me encanta el trabajo de editar manuscritos o textos sin terminar, bocetando ideas, etc. y quería averiguar un poco sobre estas diferencias (editor/corrector literario) y las tareas que implicaría.
Desde ya, muchas gracias y ojalá me puedas ayudar 🙂
Rosario.
Hola, Rosario. Esta entrada sobre los diferentes tipos de editores te ayudará a aclarar las diferentes acepciones del término. Saludos.
Hola, Mariana. Cada entrada tuya es impresionante: se nota que tras cada palabra hay una persona con mucho conocimiento y experiencia. Mi andadura profesional ha sido un poco en zigzag. He ejercido como correctora la mayor parte del tiempo, pero siempre he querido dar el salto y ser editora. Ahora mismo trabajo como asistente editorial… de una revista científica. Y es ahí donde tu texto tiene un gran valor, pues, como dices, hay más textos que los literarios. ¿Crees que es necesario hacer un máster en Edición para dar ese salto del que hablo? Leí que habías estudiado en la Pompeu. Ese máster me gusta mucho, pero ¿sus contenidos se pueden extrapolar a la edición de textos de todo tipo? Gracias mil. Saludos desde Colombia. 🙂
Hola, Nesly:
El máster de la Pompeu es presencial, en Barcelona, y es un máster enfocado en lo literario. Solo hay un par de clases sueltas en las que un editor o comercial habla de libro de texto, otro de libro ilustrado fotográfico (cuando yo lo hice no recuerdo que alguien haya impartido algo sobre libros ilustrado infantil), nada de edición científica-técnica, edición de libros de religión, coleccionables, ni libros prácticos, etc., etc. Es un máster enfocado en la narrativa (básicamente, novelas), en la compra y venta de derechos y el editor como director editorial.
¿Se puede extrapolar a otros ámbitos de la edición? Sí, aunque depende de ti cómo lo traslades a otras disciplinas; por ejemplo, la parte de derechos de autor es útil para cualquier ámbito. ¿Es extrapolable a otros tipos de textos? Te diría que no, porque los contenidos del máster no están enfocados en el texto sino a la labor del editor gerente antes que al de contenidos.
Debes considerar mi opinión a la luz de que cuando yo comencé el máster tenía 8 años de trabajo en editoriales a mis espaldas (tenía compañeros que recién había acabado una carrera de grado), que estas editoriales no eran de narrativa y que lo que me gusta es justamente «la otra edición». Un amigo editor se ríe de mí porque dice que soy la única persona que conoce que disfruta editando gráficos, cuadros, revisando bibliografía y «esas tareas ingratas y mal pagadas de la edición» 😆 . Saludos.
Muchísimas gracias por tu pronta y completa respuesta, Mariana. Nunca había pensado en que un Máster en Edición pudiera centrarse en un solo tipo de textos. Siempre se presupone que la Edición es una sola y tú acabas de abrirme los ojos. Gracias, porque aunque siento simpatía por la edición literaria, no es a la que quiero dedicarme en exclusiva. Me lo pensaré mejor. 🙂
Me ha encantado este articulo siempre valoro mucho el tecnicismo, y esta explciacion es mas que perfecta para distinguir y comenzar a entender el mundo de las editoriales, libros, edicion etc.