Hace bastante tiempo que les debo al blog y a los lectores una entrada sobre encuadernación de libros.

Gracias a que me hice con un ejemplar de The Book Block – O Miolo do Livro me dispongo a ello.

La encuadernación es «el arte de vestir el libro mediante la unción y el cosido o pegado por el lomo de los pliegos que lo forman, a lo cual se añade la cubierta» (José Martínez de Sousa, en Manual de edición y autoedición; Ediciones Pirámide, 2005).

Como toda lista, la de este artículo contiene inexactitudes y carencias. Mi objetivo es facilitar referencias sobre la encuadernación de libros, una parte fundamental del proceso de fabricación de libros, a quien visite el blog.

Y, una vez más, también como herramienta de trabajo propia —aunque otros también lo aprovechen— para ofrecer información a clientes.

La encuadernación forma parte del proceso de impresión, no del de edición. Por tanto, es ajena al diseño y maquetación de un libro, aunque siempre debe considerarse para efectuar estos dos servicios.

Por otro lado, la impresión y encuadernación no son posibles sin el proceso de composición previo. Para entendernos: no puedes poner un tejado si no tienes las paredes levantadas (y mejor si están bien construidas). 😉

The Book Block – O Miolo do Livro

The Book Block – O Miolo do Livro es una publicación donde se detallan las técnicas de encuadernación industrial más habituales.

Rúben Dias, Fábio Martins y Ricardo Dantas, del estudio de diseño Itemzero, se unieron a Rui Oliveira de Gráfica Maiadouro para dar luz a esta edición bilingüe inglés-portugués.

Completamente ilustrado, el libro facilita el acceso a los diferentes conceptos de cada técnica de encuadernación industrial.

Con un lenguaje conciso y directo la información es provechosa para conceptualizar, diseñar y producir cualquier tipo de publicación.

The Book Block – O Miolo do Livro

Cómo elegir la encuadernación más adecuada

Por supuesto, la elección de un tipo de encuadernación u otro depende de varios factores.

Algunas veces ni siquiera podemos escoger la encuadernación que queremos para nuestro libro.

Tal es el caso de Amazon que solo ofrece tapa blanda encolada y sin solapas; y, próximamente para quienes aún no lo tienen, también tapa dura encolada.

Sí ofrece la alternativa del optar por el acabado mate o brillante, pero no la encuadernación cosida.

En definitiva, al momento de elegir la encuadernación para un libro (nuestro o de clientes), debemos considerar las siguientes cuestiones:

  • el contenido de la obra;
  • el uso que esta tendrá;
  • el tamaño del libro;
  • el coste de fabricación.

Editar una novela negra no es igual que hacerlo con un tratado sobre epidemiología. La cantidad de veces que se manipulará una novela no es similar a la que se consultará un manual científico.

Por tanto, un libro de referencia y cualquier publicación de consulta frecuente precisa una encuadernación más robusta y resistente.

Lo mismo sucede con un libro de gran formato, voluminoso, cuya encuadernación, necesariamente, debe ser consistente y firme.

Una agenda o calendario se usa a diario y se abre y se cierra varias veces. Sin embargo, una encuadernación maciza resulta poco práctica y una de anillas o espiral cumplirá mejor su finalidad.

Por último, el precio también influye. Los presupuestos para impresión tienen un límite de gasto y no siempre se puede usar la encuadernación que queremos.

Puede que nos encante la encuadernación cosida con cabezada, pero el presupuesto destinado solo alcance para un encolado PUR.

Tipos de encuadernación de libros más comunes

Hay distintos tipos de encuadernación de publicaciones, aunque algunas son más populares que otras.

Y digo publicaciones porque la encuadernación no se limita a libros, sino a cualquier conjunto de pliegos que necesite unirse, como catálogos de productos, muestrarios, guías, libretas, etc.

En esencia, para unir pliegos podemos recurrir a las grapas, el espiral, la cola (pegado) y la costura (cosido).

En las más populares y al alcance de nuestras manos destacan las siguientes.

Encuadernación grapada o a caballete

Es el proceso por el que los cuadernillos impresos se unen mediante grapas metálicas.

Estas grapas son piezas pequeñas de alambre de acero inoxidable. Las más corrientes son planas, aunque también existen las llamadas grapas omegas.

Este tipo de grapas, además de dotar de elegancia a las publicaciones, permiten que estas sean archivadas.

La encuadernación con grapas se emplea en revistas y en algunos periódicos; también en libretas, cuadernos y libros de pocas páginas.

Se trata de una encuadernación sencilla, económica, y de especial utilidad cuando la publicación tiene poco volumen.

Encuadernación grapada o a caballete

Encuadernación espiral o wire-o

La técnica consiste en pasar una espiral de alambre por un conjunto de agujeros hechos en las hojas a encuadernar.

Cuando el alambre es uno solo hablamos de espiral y cuando los alambres son dos de wire-o (o guairo); pueden ser metálicos o de plástico y los hay de diversos colores.

A la vez, puede ser wire-o visto, integrado o escondido, por tramos o canadiense.

De coste económico, puede resultar útil para publicaciones especializadas, de carácter técnico y educativo, recetarios, agendas y libretas; también cuando se envían manuscritos a agentes o editoriales.

Encuadernado con espiral o wire-o

Encuadernación en cartoné o tapa dura (trade, hardcover)

Llamamos así a la encuadernación en la que se emplean tapas de cartón para cubrir la tripa de un libro, a la que se unen mediante las guardas.

Tradicionalmente, los cuadernillos impresos van unidos con costura, con encuadernación cosida; sin embargo, nada impide que la unión sea encolada o fresada.

Básicamente, por una cuestión de costes, algunos libros recurren al encolado aunque las tapas sean de cartón.

Destaca en los libros de gran formato; los de fotografía, arquitectura y diseño; en los coffee table book y también en algunas novelas y libros de no ficción.

Encuadernación en cartoné o tapa dura

Encuadernación cosida

La encuadernación cosida es el método por el que los cuadernillos están unidos mediante hilo y no cola.

Si bien es la predominante en libros de tapa dura o cartoné, no existen motivos por los que no pueda usarse también en libros cuyas cubiertas son en rústica (en cartulina).

Esta técnica es más lenta y cara que la fresada, pero de mayor calidad y durabilidad.

El cosido admite diferentes técnicas, como la bizantina o a la greca, a la española o pliego a pliego, de cosido continuo; o a la francesa o saltado, de cosido alterno.

Encuadernación cosida

Encuadernación en rústica o tapa blanda (paperback)

Es la encuadernación en la que se usa cartulina o cartoncillo en lugar de cartón para revestir el interior de la publicación.

El libro puede llevar solapas o prescindir de ellas, y la tripa estar cosida o encolada; esta última se emplea, sobre todo, cuando hay premura o necesidad de ahorrar costes de producción.

Destaca en algunas novelas y libros de no ficción, aunque el ejemplo más cabal son los libros de bolsillo.

Encuadernación en rústica o tapa blanda (paperback)

Encuadernación fresada o encolada

Es aquella en la que se emplea cola para pegar las páginas cortadas y la cola más empleada actualmente es la cola PUR.

También se la conoce como encuadernación a la americana.

El encolado o fresado se aplica mayormente a publicaciones impresas en rústica, sean libros, informes, manuales o catálogos.

Es la encuadernación de libros que ofrece Amazon KDP, tanto para los de tapa blanda como los de tapa dura.

Encuadernación fresada o encolada

Encuadernación térmica

Este método usa el calor para sellar las hojas, es rápido y económico, y para opúsculos de unas 50 páginas.

Se aplica cola y luego calor para que las páginas queden unidas entre sí con un buen sellado. A la vista, es muy similar a la encuadernación fresada.

Otros tipos de encuadernación

Entre las técnicas siguientes las hay algunas más manuales, artesanales y menos profesionales (DIY – Do It Yourself ), y otras también industriales.

Ninguna deja de ser interesante y en cuestiones de diseño editorial todo es explorar y experimentar.

Fástener y broche alemán

Fástener y broche alemánEl fástener es una pieza metálica o de plástico cuyos extremos se doblan para sujetar papeles agujereados con una perforadora.

El broche alemán es una cabeza de metal con dos patitas que se abren para permitir que las hojas se mantengan juntas.

Aunque ambos sean usados para organizar trabajos o ejercicios se pueden emplear de manera creativa para algunas encuadernaciones.

Puede usarse para ciertos libros de autor, conjuntos de poemas o para algunas presentaciones a clientes.

Encuadernación con anillas

Al igual que la anterior, es una técnica sencilla, rápida y económica, solo que por los agujeros perforados se pasan anillas o arandelas.

Hay variedad de medidas, diámetros y grosores de arandelas, incluso de diferentes materiales y colores.

Se usa mayormente en manualidades, como álbumes de fotos y de recortes (scrapbooks).

Con anillas

Encuadernación en canutillo

Encuadernación en canutillo Es la encuadernación en la que se usan canutillos de plástico y su uso está extendido, sobre todo, en copisterías.

No es idónea para uso profesional, aunque es una solución económica y cómoda para pocas unidades.

Aunque las hojas tienen un giro limitado y esta encuadernación no admite una apertura de 360 grados, es suficiente para compilar manuscritos para ser presentados en concursos o para efectuar el registro de las obras.

Encuadernación con tornillos

Similar al broche alemán pero elegante, esta encuadernación consiste en usar tornillos para unir las hojas.

El lomo queda sin tapar, las cubiertas son de tapa dura y permite expandir el contenido hasta el largo de los tornillos; ideal para cualquier libro con necesidad de actualización constante.

Es una encuadernación rápida, de bajo coste y original.

Predomina en los álbumes de fotos y de recortes, menús de restauración y piezas de experimentación gráfica.

Encuadernación con tornillos

Encuadernación con tela

Se usa para recubrir la parte exterior de una publicación, sea todo el exterior o solo del lomo.

La tela empleada para encuadernar es de un tipo especial (no sirve cualquiera) y las hay hasta impermeables y lavables.

Es un tipo de encuadernación clásico que se reserva para libros que requieren de cierta elegancia tradicional. También se emplea en publicaciones corporativas o en piezas con estilo.

Encuadernación con tela

Encuadernación con tapas de madera

Como su nombre lo indica, las tapas son de madera y pueden unirse al interior mediante la técnica japonesa o copta. Sin embargo, la más rápida y económica es con tornillos.

En la actualidad, el bambú también puede usarse para crear tapas para publicaciones. El inconveniente que presenta es que no permite corte mecánico y hay que trabajarlo a mano, encareciendo el coste de producción de la pieza.

Es fácil encontrarnos este tipo de pieza en menús de restaurantes y cartas de vinos en bodegas.

Encuadernación en cuero o piel

Existen distintas clases de pieles destinadas al recubrimiento de las tapas para los libros. Según el animal del que procedan tienen diferente grosor, grano, calidad, color y acabado.

Este material suele emplearse en la restauración de libros antiguos.

Algunas agendas y cuadernos estilo de bitácora están revestidos en cuero o con un material que lo imite, como el polipiel.

Encuadernación en cuero o piel

Encuadernación coptaEncuadernación copta

Consiste en la unión de los cuadernillos y las tapas mediante costura, por lo general, con nudo cadeneta.

Esta encuadernación de libros también se la conoce como cosido copto. Con los nudos, además de sujetar cuadernillos se se pueden formar diferentes patrones para embellecer su unión.

Las tapas se unen a los cuadernillos con la misma técnica, y estas pueden ser de diversos materiales: madera, cartón, cartulina, etc.

El lomo queda al descubierto, por lo que la costura queda a la vista. Es un procedimiento artesanal muy empleado en manualidades.

Encuadernación japonesa

Igual que la anterior, la encuadernación japonesa es artesanal y requiere de gran destreza y cuidado.

Las hojas se unen a las tapas mediante costura con técnicas específicas. Los cosidos japoneses son de cuatro o cinco agujeros, cuatro si siguen la tradición china y cinco si lo hacen por la coreana.

El método yotsume toji es el más básico y es el de cuatro agujeros, mientras que kangxi es una variante de la anterior, con refuerzo en las puntas.

El asa-no-ha toji y el kikko toji son sistemas de unión más resistentes y decorativos que los dos anteriores.

A diferencia de la copta la encuadernación japonesa es más versátil.

Encuadernación japonesa

Encuadernación belga

También se la conoce como encuadernación entrecruzada y surgió como alternativa a la japonesa en los ochenta del siglo XX.

La encuadernadora belga Anne Goy buscaba un acabado que permitiera que el libro se abriera en 180 grados y que, al mismo tiempo, fuera sencillo de hacer.

De este modo, las cubiertas poseen tres piezas, son transferibles y un patrón específico de cosido.

Encuadernación belga

Cosido Singer

Es un tipo de encuadernación con hilo a la vista, muy llamativo, que da carácter al producto impreso.

La costura puede hacerse en el doblez de los cuadernillos, en el lomo, o sobre las cubiertas.

Los colores de hilos disponibles son amplios y esto permite integrar la encuadernación al propio diseño de la pieza.

Llamada así por la marca de las máquinas de coser Singer, es ideal para libros con pocas páginas.

Cosido Singer

¿Quieres conocer más sobre encuadernación de libros y piezas similares?

¿Te gusta encuadernar o experimentar con papeles y cartulinas y quieres aprender más? Lee los siguientes blogs y libros:

Fuentes de información sobre encuadernación de libros: las empresas y las páginas web de las que se obtuvo la información y algunas de las imágenes están debidamente identificadas y sus URL enlazadas en el texto.


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