Para saber cuánto cuesta imprimir un libro o cualquier otra publicación es muy importante redactar de forma correcta el presupuesto de impresión.
¿Vas a encargar la impresión de ejemplares de tu libro? ¿No sabes qué información incorporar en el presupuesto que enviarás a la imprenta? ¡No te preocupes!
He creado un formulario en PDF para que recolectes toda la información que necesitas y poder solicitar un presupuesto a cualquier imprenta ⇒ Descárgalo gratis. Solo tienes que rellenar el PDF e imprimir, en papel o en un nuevo PDF.
Cuanto más amplia y clara sea la información del presupuesto, más fácil será para el impresor realizar la cotización. De esta forma, tendremos un presupuesto justo para evaluar los costes de impresión.
Para solicitar un presupuesto de impresión debe incluirse la siguiente información. Los primeros datos son válidos para todos los tipos de libros (hasta el punto 8) y los demás opcionales:
1. Tipo de publicación
Si es una revista, un libro en tapa blanda (paperback), un libro en tapa dura, de bolsillo, etc.
2. Formato y tamaño
Refiere al formato: vertical, horizontal o cuadrado y tamaño de la publicación.
Se debe indicar el tamaño final de la publicación; DIN A4, DIN A5, tabloide, 200 × 270 mm, etc.
Mejor todavía si especificas el tamaño cerrado y abierto de la publicación.
3. Cantidad de páginas
Es el número de páginas totales del interior de la publicación, de la tripa. No se cuentan la cubierta, la contracubierta y ni las páginas de guarda, en caso de que el libro las lleve.
Conviene que la cantidad de páginas del libro sea múltiplo de 8 o 16, para ahorrar costes de impresión, si la impresión es offset. Con impresión bajo demanda no hace falta más que un número par.
4. Interior (tripa)
- Tipo de papel: se debe indicar el tipo de papel y el gramaje del mismo. Por ejemplo, papel obra de 90 gramos o papel estucado de 115 gramos.
- Color: las dos variantes más utilizadas son 4/4 y 1/1. Estos números indican la cantidad de colores que se imprimirán en las caras de las páginas. 4/4 significa que se imprime a todo color por ambas caras. 1/1 que sólo se imprime un color (generalmente es el negro). Si se indica 2/2 hay que especificar cuáles son esos dos colores, por ejemplo: negro + magenta.
- Páginas de guarda: si el libro también las incluye, hay que indicar el tipo y el gramaje del papel, además del color de las páginas de guarda.
5. Exterior (cubiertas)
- Tipo de papel: la cubierta y contracubierta llevan un tipo de papel con más gramaje que el del interior de la publicación. Incluso en las revistas de gran tirada y poca calidad. Aquí también hay que indicar el tipo y el gramaje del papel; por ejemplo, cartulina de 300 gramos.
- Color: 4/0 suele ser lo habitual. Esto es, 4 colores en la parte exterior (cubierta y contracubierta) y ninguno por la parte interna.
- Plastificado o laminado: brillante (glossy en Amazon KDP) o mate.
- Acabado: también se debe consignar si el libro llevará otros tipos de acabados, como stamping, relieve o gofrado, sectorizado UV, calado, etc.
- Solapas: si el libro las lleva, especificar sus medidas; por ejemplo: 90 mm.
6. Tipo de encuadernación
Esta puede ser en espiral (wire) a la vista o estilo canadiense, grapada o acaballada, binder, fresada o cosida, etc. Los diferentes tipos de encuadernación están detallados en esta entrada.
La encuadernación más usada en la actualidad, y sobre todo en impresión bajo demanda, es la fresada con cola PUR.
7. Lomo
Según el tipo de encuadernación, el libro tendrá lomo o no (la encuadernación en espiral no lo tiene).
Si queremos imprimir un libro debemos solicitar que nos informen el ancho del lomo basándose en las características del presupuesto.
Es el impresor quien te dirá de cuántos milímetros debe tener el lomo; la obtiene calculando la cantidad de páginas más el tipo y el gramaje de papel del interior.
Esta información es vital para que el diseñador pueda preparar correctamente los archivos del exterior del libro de forma correcta.
8. Cantidad de ejemplares
La cantidad de copias que deseamos del libro. La impresión offset conviene siempre que sean tiradas superiores a 500 ejemplares.
Si quieres imprimir pocos ejemplares (50, 100, etc.) lo más conveniente es que solicites presupuesto por impresión digital.
9. Elementos adicionales
Incluir también en el presupuesto si se desean elementos adicionales como:
- Faja: si va en color; el ancho y largo de la misma, y la altura a la que debería colocarse en el libro.
- Camisa o sobrecubierta: tamaño, color y tipo de papel de este elemento, más si llevará acabados extras.
- Cabezada: la cinta que va a lo largo del lomo, en la parte inferior y superior del mismo.
- Marca-páginas: adherido al lomo del libro y, por lo general, es de tela.
10. Embalaje de las publicaciones
Nunca está de más consultar cómo recibirás los ejemplares. Especificar si se quiere cada ejemplar retractilado o en grupos de 5 o 10 ejemplares, cajas de 20 ejemplares sin retractilar, etc.
Conviene preguntar en la imprenta qué tipo de embalajes utilizan y cuál sale más económico.
11. Formas de pago
Que acepta la imprenta. La imprenta pedirá un tanto por ciento para poner en marcha el trabajo y el resto al finalizar el mismo.
Cuando la tirada es corta y con impresión digital se suele pagar el 100 % al momento de encargar el trabajo. Consultar también si la imprenta trabaja con plazos de pago a 30, 60 o 90 días.
12. Plazos de entrega
De las copias impresas y en el lugar que tú indiques. Para evitar malentendidos, preguntar a partir de qué momento comienza a estar vigente el plazo de entrega.
Por ejemplo, si el tiempo comienza a contabilizarse desde el momento de realizar el pedido o cuando se confirma la prueba de impresión.
Y asegúrate si cobran o no gastos de envíos (traslado de las publicaciones desde la imprenta hasta el punto donde tú quieres recibirlas).
Habla con el impresor, déjate asesorar
La mayoría de las imprentas poseen estándares para favorecer el ahorro de costes, como determinados formatos de páginas, solapas con medidas preestablecidas, etc.
Para tener lo más “cerrado” un presupuesto siempre es aconsejable consultar con el impresor todas las dudas que puedas llegar a tener.
Este profesional puede ayudarte a mejorar el presupuesto de impresión, economizar tiempo y, sobre todo, dinero. También a considerar otras opciones y ahorrarte dolores de cabeza durante el proceso de edición de la publicación.
También conviene asesorarse con el profesional de la imprenta cómo prefiere que sean enviados los archivos. Normalmente, se utiliza el formato PDF para las artes finales (que no es el mismo tipo de PDF para publicaciones digitales). No se envía un empaquetado con archivos, imágenes y fuentes (hasta hace pocos años sí se hacía). De todas formas, consulta con la imprenta y pregunta con qué características debes enviar los archivos PDF.
Considera que, según el país o las regiones, algunas denominaciones pueden variar. Por ejemplo, el papel estucado puede llamarse también papel ilustración, el lacado denominarse plastificado o el impresor, imprentero.
⇒ Descarga gratis el modelo de presupuesto para impresión en PDF.
Complétalo con los datos de tu libro y envíalo a la imprenta. Con este formulario:
- Ahorras tiempo de comunicación con la imprenta: el impresor te enviará los costes sin demoras.
- Tienes organizados los datos técnicos y gráficos de tu libro.
- Puedes reutilizar la información para otras cuentas y acciones.
Muchísimas gracias Pablo por dejar tu comentario aquí además de en LinekedIn.
Tu comentario es de un gran valor, especialmente porque es la visión de quien está «del otro lado», de los que reciben presupuestos para imprimir. Y nada mejor que conocer la opinión de las contrapartes para establecer conceptos claros y hacer fuir la comunicación entre todas las partes que intervienen en la edición de publicaciones.
Como comentaba en la discusión del grupo Atelier de LinkedIn «siempre que puedo (a menos que sea un impresión digital de pocos libros solicitados por Internet) me gusta tener una reunión con el impresor, incluso antes de maquetar y comenzar la edición de los libros. Más aprovechable aún si se hace antes de una colección, porque puedes terminar de perfilarla con el impresor. Además de las ayudas que mencioné en el post, un intercambio previo con un profesional de las artes gráficas hace que en todo el proceso haya menos probabilidad de errores».
En resumen, contacto y comunicación, intercambio de conocimientos y apertura mental para recibir todo tipo de inputs 🙂
Hola, Mariana.
Me presento, soy Pablo Murillo, trabajo en el Dpto. Comercial de una empresa de artes gráficas de Zaragoza, en España, hace …. demasiados años y he leido tu aportación con interés, la encuentro bastante completa y acertada.
Por aportar algo a tu trabajo, me permito añadir que es importante que la imprenta conozca como se la van a entregar los originales y que cantidad de pruebas previas van a ser solicitadas.
En la actualdiad, casi todas las empresas de artes gráficas de una dimensión media, tienen su propio Dpto. de Preimpresión y deben revisar los originales facilitados por los clientes. En muchas ocasiones, dichos originales no cumplen con los estándares mínimos de calidad y acabado necesarios para entrar en el ciclo de trabajo industrial de una imprenta y deben ser reelaborados por los diseñadores y maquetadores de las imprentas. Estos trabajos cuestan tiempo y dinero y por tanto debe de ser -en la medida de lo posible- una partida económica conocida. Por mi experiencia, en muchas ocasiones, aunque el trabajo provenga de un gabinete de diseño, no siempre es correcto al 100%. Muchas gracias.
Yo he tenido la ventaja de que al venir de unos estudios técnicos, siempre he redactado unas solicitudes de presupuesto bastante claras, acordes con lo que dices en tu artículo. Y a veces tener muchos conocimientos técnicos te ayuda también a proponer cosas a la imprenta que pueden mejorar el trabajo y en las que un creativo puro y duro no caería.
Gracias a esto me he ahorrado muchos problemas y cruzar muchos mails con dudas de la imprenta.
El problema es cuándo ha habido un comercial por medio, o ciertas imprentas que no tienen una buena comunicación en su equipo y se contradicen en las especificaciones (y al final crea riesgo de errores, retrasos, etc.).
Por este último motivo me he encontrado con errores muy gordos en cosas muy sencillas. Por ejemplo trabajando en packaging, para imprimir las tapas de unas bandejas de plástico… han llegado a cambiar de medidas 3 o 4 veces, porque el comercial dice unas medidas, pero el impresor necesita otras, y solo te avisan del error cuándo llega a la máquina y no se puede hacer. Por lo que un trabajo con el que contabas con una semana de ventaja, en un momento te han dado 2 horas para arreglarlo y volverlo a enviar.
Si hacemos caso de todo lo que pone en este artículo tenemos nuestro 50% de efectividad, ahora bien, hay que esperar que los de la imprenta también den buena información… Así que cuidado con las imprentas, que por normal general, cuánto más grande es más errores de comunicación tienen.
Gracias Fanoman por tu mensaje. Me has hecho recordar una experiencia particular con el tema de los comerciales… Como dices, es preferible hablar directamente con la persona que se encargará del trabajo, porque en cuestiones técnicas algunos comerciales no están al tanto y eso se nota al hablar con ellos y hacer unas pocas preguntas. Y además tener en cuenta siempre que las imprentas son una parte “sensible” del proceso de edición de una publicación.
Gracias por pasarte por aquí y comentar 🙂
Muy buena la entrada; es necesario saber cómo pedir presupuestos a una imprenta para evitar desastres posteriores. Felicidades Mariana. Nos leemos y seguimos.
¡Gracias por el comentario Irene! Los sigo en Twitter y tengo vuestro blog en mi eReader también 😀
Muy interesante! Maeriana ha tenido casi todos los factores que intervienen en un presupuesto en cuenta. Aunque desde mi punto de vista, el consejo de los profesionales es imprescindible para conseguir lo que normalmente se pretende: un equilibrio entre calidad/costes. Aspectos como la «mano» o «volumen» del papel, que hacen que un papel de menor gramaje tenga el volumen del de un papel superior, o el tamaño de las páginas, muchas veces definido innecesariamente por estándares (A4, A5, etc.) o por caprichos del diseño sin tener en cuenta el proceso industrial (Muchas veces unos milímetros de más pueden encarecer el producto). A este mismo aspecto pertenece el número de páginas; dices «múltiplos de 16», pues depende (como buen gallego) del formato de la página y del tipo de encuadernación, puede ser que sea mejor un pliego de 20 o de 24 o que no tenga importancia si se encuaderna «a la americana». En resumen, es importante cuando se inicia un proyecto de diseño editorial pensar y «solucionar» los aspectos industriales y logísticos. Un ejemplo muy claro es el papel, si le damos suficiente tiempo el impresor puede utilizar papel «de fabricación» (a la medida exacta de la forma de impresión que necesitamos, por ejemplo: 65 x 90) en lugar del papel de almacén que tiene medidas estándar (en el ejemplo anterior 70 x 100) lo que redundará en un ahorro importante en el coste del papel (en el caso supuesto es de más del 15 %). Siempre además hay que tener en cuenta (que me perdonen mis amigos impresores) que los consejos de las imprentas nos garantizarán la parte «calidad» y «viabilidad» del proyecto pero no la de «costes» ya que tienen un negocio y como es lógico… Si pedís 4 presupuestos a 4 imprentas diferentes con los mismos items a presupuestar las diferencias entre unos y otros pueden ser muy importantes y lo digo con conocimiento de causa ya que ha sido una de mis ocupaciones durante muchos años. Y, en muchas ocasiones, no se trata de que uno sea «caro» y otro «barato», se trata de elecciones diferentes para enfrentarse a un mismo producto o que la estructura de costes del impresor en cuestión no se adapta a ese proyecto y es mejor para otro, etc. Reivindico la figura del «director de producción» que tienen las editoriales, para los diseñadores con pocos conocimientos de impresión será útil (y rentable) acudir a profesionales y empresas que realizan esa función de intermediación con el impresor.
Vaya rollito me he marcado, pero es un tema que me apasiona… lo siento. Saludos y de nuevo mis felicitaciones a Mariana por su aportación.
Muchas gracias por venir a mi blog y dejar tu comentario José Antonio. Tu aporte es valiosísimo y el tema da para más de un post.
He tenido la buena experiencia de sentarme a hablar con un impresor y no sólo lograr abaratar los costes, sino también mejorarlos. Por eso tu apreciación sobre que una imprenta se adapta más a un proyecto que a otro me parece excelente. es un punto que se debería tener en cuenta siempre a la hora de pedir y recibir un presupuesto.
Muy buen aporte el com ose debe de realizar un presupuesto para una imprenta,yo trabajo en una y me esta siendo de gran utilidad este articulo,ya que que nos ayuda a mejorar la elaboracion de nuestros presupuesto para la imprenta.Tambien los clientes estan muy agradecidos por que asi elaboramos unos presupuestos muy personalizados.
¡Me alegro que os sirva Pablo! ésa es la idea de este post. Muchas gracias por visitar mi blog y comentar.
Esto está muy interesante. He recorrido todo el espinel logrando perfeccionar muchas etapas, soy jubilado y tengo tiempo para hacerlo, he logrado muy buenos resultados, voy por mis primeros 11 libros impresos, más los que ayudé a hacer para terceros. Me tomé el trabajo de hacer un estudio de cada etapa y salvo la de corrección final que tuve que derribar aprendí bastante y llevo todo a buen puerto. Mi último punto en discusión es la venta, no le encontré aún la manija al tema, tampoco me lo propuse seriamente. Creo que todos estos comentarios que leemos son muy útiles pero este último punto sigue siendo un incomprensible.
He sido presidente de una pequeña empresa y este debería ser el menor de mis problemas, pero, parece que no es así. Felicitaciones por el Blog y los comentarios recibidos.
Muchas gracias Paul por tu visita a mi blog, por comentar en él y por tus palabras a este espacio.
En el sector editorial la parte de la venta es clara: los distribuidores de libros mayoristas les venden a las librerías o supermercados o grandes superficies. De forma privada, es decir, si uno de autopublica, el fuerte debe ser el marketing, especialmente para dar a conocer el libro, y también posibilitar al lector que pueda comprarlo fácilmente, por ejemplo, a través de una página web.
Excelente artículo, felicidades. Por aportar algo debo decir que hoy día prima la satisfacción al cliente y es interesante ver una muestra de artículos similares impresos por el profesional de las artes gráficas así que recomiendo que antes de imprimir el trabajo os cercioréis de que lo presupuestado es lo que vais a recibir a fin de que no hayan confusiones de última hora.
Increíbles consejos para pedir un presupuesto a las mprentas.
Me encantó tu artículo.
Saludos!
Todos los escritores que se autopublican te adoraran por este articulo. Es la mejor explicación de las interioridades de impresión que he leído en toda mi carrera. En una etapa de mi vida periodística yo tuve bajo mi sola responsabilidad la publicación e impresión de revistas y, creeme, nunca antes vi una mas detallada exposición de las características de impresión. Felicitaciones!
M. Kenia
Gracias, Mónica. Por tus palabras, por leerme y por comentar. 🙂
Me parece un articulo muy completo, esta todo muy bien explicado con mucho detalle y facil de entender para todo el mundo, muy bien estructurado, me ha sido de gran utilidad, enhorabuena para el creador de articulo.
Felicidades por el artículo, Mariana. Como empresa de impresión conocemos todos los detalles y complejidades de todo el proceso de imprenta y los has detallado a la perfección. Compartimos con tu permiso para que todos los interesados en imprimir tengan la información.
Gracias, Pedro. Es un presupuesto que sirve de base para que autores y editores pidan presupuestos por una obra «normal». Para piezas más exquisitas, con más acabados y más procesos de post-impresión, habría que sumar datos. Esto lo dejo para una próxima entrada. 😀 Gracias por compartir y comentar.
Muchas gracias, Mariana, un gran servicio para el escritor, y tan generoso….
Mario B